¿Cómo adoramos? o
¿Quieres ser un director de alabanza o un líder de adoración?
Rodrigo García G.
A través de este artículo quiero explicar cuál es nuestra forma y estilo en la adoración y definir cuáles son nuestros valores específicos en la adoración, pues nuestro estilo de adorar y las canciones de la Viña tienen mucho que ver con lo que somos y creemos. Quiero además dejar en claro que el enfoque principal de este artículo está en el cómo adoramos, pues el por qué adoramos es algo común con muchas iglesias y movimientos.
También mediante este artículo podrás comprender mucho mejor los artículos siguientes, ya que estos autores al escribirlos están pensando en la doctrina de adoración de la Viña, la cual tampoco es exclusiva nuestra, pues hay muchas iglesias que comparten estos valores y principios que aquí vamos a estudiar.
Primero quiero hablar sobre la doctrina más popular y conocida por lo menos en Chile y Latinoamérica, la cual es conocida como Alabanza y Adoración (AA).
También quiero dejar en claro que personalmente creo que estas 2 corrientes (y tal vez hay más) difieren solamente en la forma (estilo y lenguaje principalmente), ya que en el fondo comparten el mismo principio, que es ser adoradores y adorar a Dios con la música, y que partieron de un despertar mundial que hubo en la adoración de fines de los 70 y principios de los 80, y que ha tomado distintas formas, lenguajes y estilos.
En ambas doctrinas la música no es un simplemente un relleno en las reuniones, para hacer tiempo o simplemente como una antesala a la predicación de la palabra, sino que es un tiempo muy importante en donde adoramos a Dios en unidad y en donde también esperamos que él se manifieste con su presencia. Muchas veces Dios incluso se mueve sobrenaturalmente en este tiempo en sus diversos dones.
Sobre los fundamentos de por qué adoramos, ver el artículo 5 “La importancia de la adoración”. Ahora nos vamos a centrar en cómo adoramos.
Al decir que tenemos nuestro propio estilo en la adoración, quiero contar una muy buena analogía. Cuando vamos a una heladería (gelatería), hay helados de distintos sabores, pero todos son helados en su esencia, pero con un distinto color, olor y sabor. Así son las iglesias, en sus principios fundamentales son iguales, pero cada uno tiene su propio color, sabor y olor. Así es nuestra adoración, ni mejor ni peor, sino que con su propio estilo.
“Alabanza y Adoración” (Praise and Worship)
Primero estudiaremos los principios de la AA para después compararlo con nuestra lenguaje de adoración. Sin querer ser despectivo, mi intención es establecer claramente nuestro estilo de adoración.
Curso de Adoración “Más que música...adoración” – Principios y Valores de la Viña – Recopilación: Rodrigo García
La doctrina de alabanza y adoración fue popularizada en inglés por el sello discográfico Hossana Music con su serie de discos Praise & Worship y posteriormente en español por el sello Canzion Producciones, desde el disco proyecto AA (Alabanza y Adoración) de Marcos Witt en adelante. Esto ha sido muy importante en el despertar y renovar de muchas iglesias y ha influenciado a muchos líderes.
Esta doctrina está fundamentada en el libro de los salmos, específicamente en el Salmo 95, llamado en la versión Reina Valera Salmo de Alabanza y Adoración, de los cuales se puede deducir (según esta teología) que existen 2 instancias de acercamiento a Dios con expresiones específicas en cada momento: la alabanza y la adoración. Una analogía también muy usada en esta teología es que la alabanza equivale al Lugar Santo y la adoración al Lugar Santísimo., en la cual la alabanza corresponde al lugar santo y la adoración al lugar santísimo (esto es en el templo en donde adoraban los israelitas del antiguo testamento, 2a de Crón. 3 y 4).
Esta corriente ha tomado una forma bastante específica y es la siguiente: durante una reunión o culto, el tiempo dedicado a la música se divide 2 partes, estableciendo una diferencia marcada entra la alabanza y la adoración:
1) Alabanza
- Tiempo de júbilo y celebración
- Se usan principalmente canciones que hablan de Dios en 3a persona (Él
es....), contando de lo que Él ha hecho, sus maravillas, hechos, etc.
- Canciones de ritmo rápido
- Se acompaña con aplausos, gritos de alegría, júbilo, gritos de guerra, etc.
- Se incentiva a danzar
2) Adoración
- canciones que hablan de Dios en 2a persona (Tú eres...), hablando de lo que Él es, sus cualidades, palabras de amor, etc. un acercamiento mayor a Dios
- canciones de ritmo lento
- No se debe aplaudir, tocar pandero ni dar gritos, pues es un tiempo de
intimidad y reverencia.
- Se incentiva a levantar las manos en adoración a él, a postrarse.
arrodillarse, etc.
Muchos compositores de canciones han creado canciones en base a estos principios y se ajustan bien a este esquema, no así los himnos tradicionales ni los coritos, que no se compusieron pensando en esta clasificación.
3) Director de Alabanza
Es el músico que a través del canto dirige al grupo y a la gente en los tiempos de alabanza y adoración. Podemos distinguir algunas características de lo que se espera de él:
- Se dirige constantemente a la gente, la anima a hacer cosas: aplaudir, levantar manos, danzar, adorar a Dios, dirigiéndolos en las distintas formas de adoración, según sea el tiempo de alabanza o de adoración.
- El director de alabanza es el responsable de llevar a la gente a adorar a Dios, dirigiéndola en cómo hacerlo.
- Generalmente se ha recomendado estar con los ojos abiertos, para ver lo que está pasando.
- Cuando hay un buen tiempo de AA, es porque el director lo ha hecho bien. Si no ha sido tan bueno, en parte es su responsabilidad. Esto creo podría llevar a sentimientos de culpa o orgullo dependiendo de los resultados obtenidos. Debemos recordar que Dios es soberano de hacer como quiera cuando quiera, no depende de nosotros.
Sin ser un teólogo, los principios señalados en los puntos 1 al 3 a partir del salmo 95 no son tan claros como para decir tajantemente “esto es alabanza” y “esto es adoración”, poniendo un límite definido y riguroso. Creo que en esto no podemos limitar a Dios. No sé cómo hemos llegado al extremo que la alabanza y la adoración son 2 cosas absolutamente distintas, cuando en la Biblia muchas veces se usan como sinónimos, o más bien una contiene a la otra. De todos modos quiero decir que respeto que este estilo le puede acomodar a muchas iglesias y debemos aceptar que esto es parte de la diversidad con que Dios puede alcanzar a distintos tipos de personas.
Lo que sí encuentro lamentable es ver a muchos directores de alabanza que lo único que hacen es repetir en forma casi textual lo que verdaderos hombres de Dios han grabado en los CD, concentrándose en sacar al pie de la letra los arreglos musicales sin captar el espíritu que hay detrás de una canción inspirada por Dios. Me encanta escuchar cómo ministran Marcos Witt, Danilo Montero , Jaime Murrel y Jesús Adrian Romero por nombrar a algunos, de quien se puede percibir claramente que son adoradores en espíritu y en verdad, lo cual no significa que copiando su estilo musical y aprendiendo de memoria sus palabras podamos tener su misma unción...
Nuestro mover de Adoración
Aunque está perfectamente explicado en los artículos siguientes, quiero establecer las diferencias más significativas de lo que nosotros creemos y practicamos.
En la Viña (y en otras iglesias) hablamos solamente de adoración, entendiendo que esto incluye todas las expresiones. La adoración entonces la dividimos en acción de gracias, celebración o cantos de intimidad, sin hacer una división tan marcada entre ellas y tampoco en nuestras reuniones.
Una vez me preguntaron, cuando estábamos organizando nuestra 2a Conferencia de Adoración......”Rodrigo... y en esta conferencia de adoración... ¿ no va a haber alabanza? ”
Personalmente creo que la alabanza está contenida en la adoración y si alguien estableció que la alabanza y la adoración eran distintas, yo me pregunto por qué no se llamó “celebración e intimidad” o por qué no se establecieron 3 partes “acción de gracias, alabanza y adoración”, o 5 secciones “acción de gracias, alabanza, adoración, oraciones y plegarias”, etc.
Si bien el salmo 95 habla de alabanza y adoración, no existe una separación tan claramente indicada, como para poder hacer toda una doctrina de esto. Además el título de salmo de AA no se le da en la Nueva Versión Internacional. También podemos leer los salmos 96, 98, 103, 116, 117, 118, 120 al 123 son oraciones y plegarias cantadas (recuerda que todos los salmos eran cantados) 124, 136, y 145 al 147. El 148 y 149 son llamadas exhortaciones, entonces encontramos mucho más que 2 secciones o tipos de cantos.
En Juan 4:23, Jesús dijo que el padre está buscando adoradores y no “alabadores” solamente. Según la definición de la palabra, alabanza es un elogio a alguien (no necesariamente a Dios), en cambio adoración es algo solo para alguien muy importante, es algo sublime. Por lo tanto cuando hablamos de adoración, incluye alabar, elogiar, expresar amor, etc. Además vemos que Jesús siempre estuvo y estará rodeado de adoración.
Por esto creo que está bien hablar sólo de adoración, que incluya a todas las expresiones y de ahí que nosotros digamos siempre ministerio de adoración, canciones de adoración y líder de adoración.
Además veamos los siguientes pasajes, en donde se habla solo de adoración:
- Mateo 2:2, 2:11, 4:10
- Apocalipsis 4:10, 5:14
Líder de adoración
En la Viña, así como en muchas iglesias, hablamos de líder de adoración (worship leader). Esto, más que un nombre solamente, se refiere a un concepto, que principalmente tiene que ver con “liderar la adoración” en vez de dirigirla. Esto quiere decir que:
1) La misión del líder y del equipo de adoración es únicamente adorar a Dios y
esto significa además como siempre digo “adorar a morir”. Es nuestra primera responsabilidad, en cualquier lugar o circunstancia que estemos.
2) El líder y el equipo de adoración son responsables solamente de su propia adoración con Dios, pues cada miembro de la iglesia puede libremente adorar a Dios o no hacerlo. También cada persona puede hacerlo de diferentes maneras.
Nuestra filosofía es “yo adoro y soy responsable de mi relación de adoración con Dios. Si tú no adoras es tu problema, la pelota está en tus pies”.
3) El líder de adoración entonces no es necesario que siempre se dirija a la gente, pues su canto y oración deben estar dirigidos directamente a Dios.
4) Esperamos que la gente adore a través del ejemplo, es decir que se incentive a adorar al ver a los grupos de música y danza adorar sinceramente a Dios, en espíritu y verdad.
5) Hay libertad para cualquier tipo de expresión de adoración en cualquier momento, siempre que estén dentro de un cierto orden y que no interrumpa el fluir de Dios. He tenido experiencias increíbles de aplausos en medio de la intimidad o de levantar las manos y postrarse en medio del júbilo y la celebración, lo cual antes me hubiera incomodado mucho.
6) El líder de adoración debe estar atento a escuchar la voz de Dios, siendo sensible a incluso cambiar los cantos o adaptarlos a lo que Dios pueda mostrar en el momento.
7) La misión del equipo de adoración es adorar y ministrar a Dios y seguir al líder tratando de fluir en unidad y sin desconcentrarse en adorar a Dios, que siempre es lo primero. Aunque obviamente es necesario ensayar y tocar bien, la música y la ejecución musical nunca pueden estar sobre la adoración a Dios. Para eso mejor ponemos un CD y adoramos...
Nuestro desafío como miembros de un ministerio de adoración es ser los primeros adoradores y proyectar la adoración que hemos practicado en la semana y el adorador que hemos llegado a ser a través del tiempo. Este creo que es siempre nuestro mayor y principal desafío.
Después de comenzar a escribir este artículo, leí el libro de Matt Redman “El adorador insaciable”, en el cual él habla de ser más que un líder de adoración, ser alguien que debe liderar adoradores. Esta visión creo que es aún más completa y desafiante. También en un artículo que leeremos está planteado que el verdadero líder de adoración es el Espíritu Santo.
8) Otro desafío como líder de adoración es no usar siempre muletillas ni frases hechas como “vamos a adorar a Dios, levanta tus manos, cuantos pueden adorar a Dios, etc.”. Tampoco usar muchas repeticiones ni hacer preguntas tontas (que yo mismo muchas veces dije) tales como: ¿cuántos pueden levantar sus manos? ...respuesta obvia: TODOS podemos levantar las manos.
Deja que la gente lo haga por su propia iniciativa, porque es un adorador y no porque alguien se lo diga. Se que este es un proceso más lento, pero mucho más profundo en cada persona.
Otro aspecto es que nuestra relación con Dios. Si no hemos pasado tiempo con Dios, no tendremos mucho que decir ni que ministrar. Si te cuesta adorar en privado, mucho más te va a costar adorar en público...frente a toda la iglesia!!!
Es bueno comenzar a liderar adoración en grupos pequeños, para ir practicando y pasando los nervios que toda persona tiene al comienzo. Pero más importante es tener una buena relación con Dios y ser un adorador en espíritu y verdad.
Después de leer este artículo y con la perspectiva de nuestra filosofía de adorar, te invito a leer los siguientes artículos. Y te desafío y te animo a que seas un adorador de esos que el Padre está buscando (Juan 4:23).